FILOSOFÍA Y DIVERSIDAD SEXUAL: APORTES
PARA UNA LECTURA DE LA CONSTITUCIÓN
COLOMBIANA EN CLAVE DE GÉNERO
Este texto es una reflexión de las nociones de sexo, género y moral circulantes en varias corrientes del pensamiento filosófico: desde el pragmatismo clásico de Dewey hasta el contemporáneo de Rorty, pasando por los sentimientos morales, el postestructuralismo, entre otras.También se busca ofrecer elementos de juicio para coordinar la interpretación constitucional del derecho a la igualdad en torno a la diversidad sexual, realizados por la Corte Constitucional colombiana, con los avances logrados en el ámbito académico nacional e internacional.
El texto presenta una profunda interpretación de la obra ética de Dewey en la cual se analiza y se estudia el marco conceptual ético adecuado para aquellos que luchan por hacer válida, aceptada y respetada los diferentes estilos de vida, y la diversidad sexual que existe en nuestra sociedad actualmente. Entre ellos la más representativa LGBTI.
El texto nos guía y nos hace reflexionar sobre la humanidad en la que estamos inmersos actualmente donde existe tristes realidades sobre discriminación y apatía a personas que aunque están en nuestra cotidianidad reaccionamos como si fueran ajenos a estos. El texto nos dice que las acciones
de cada persona hablarán, individualmente, por sí solas, pues crean referentes
para que la comunidad decida quiénes son dignos de admiración y quiénes no.
En la actualidad, hablar de tolerancia se fragmenta y se categoriza dependiendo la religión, o los ideales políticos que han sido impuestos
por un estatus o un cliché petrificado, que permite tratar mal a aquellos que no comparten los mismos argumentos y pensamientos que la mayoría.
Que existen grupos de personas que aún se resisten a la innovación de la investigación, del cambio, en últimas, a la
ampliación de los horizontes éticos que se consiguen tolerando, en sentido
pragmático, nuevas formas de relaciones sociales que se descubren a partir del
ejercicio de la libertad de pensamiento.
El mensaje central debe apuntar a la inclusión de las nacientes formas
plurales de vida, a la diversidad en todas sus formas, y aceptarlos como parte de la naturaleza social, aprender a valorar más las acciones y hábitos éticos de las personas, preocuparnos por cuestiones que realmente nos afectan a todos, a resaltar las consecuencias de las acciones, y propender por una armonía de justicia propias de una ejemplar colectividad,
Y “dejar a la comunidad ser verdaderamente espiritual, consistente en
el reconocimiento de la unidad de destino y funcionar en co-operación hacia
una total-vida-inclusiva, y consistente en lealtad hacia las posibilidades de la
humanidad, cuando sea y donde sea que se encuentren”
y que si todos aprendiéramos a convivir con tolerancia y un buen trato social no necesitaríamos actualmente leyes y reformas sobre la sexualidad y su diversidad. y utilizaríamos los marcos jurídicos como un instrumento que motive a las colectividades a convivir con
las diferencias y a dividir.
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